viernes, 8 de marzo de 2019

Primer intento al Vorder Glärnisch 2.328m (T4-, II)


Distancia: 11,90 Km
Tiempo: 5h 20'
Altitud máxima: 1.857 m
Altitud mínima: 506 m
Desnivel positivo acumulado: 1.413 m
Dificultad técnica: T4, II
Track: Wikiloc

Cualquier montañero en su sano juicio que vea esta montaña querrá subirla y aunque la salud del mio se pueda poner en entredicho, yo también quise subir allí arriba. Así que una bonita y soleada mañana de Julio me puse manos a la obra. 
Para evitar cruzarme con mucha gente decidí no subir por la ruta normal, si no por otra menos concurrida por su vertiente sur.


Lo que a la postre supondría un gran error puesto que el sol y el calor me las hicieron pasar canutas. Y aunque la primera parte del recorrido transcurre a la sombra...


... la temperatura se mantuvo todo el día por encima de los 30° llegando a marcar mi reloj los 38,5°. Osea, muuuuucho calor.


Y muchos metros que subir, la gran mayoría sin la sombra de los árboles.


Pero aquí no he venido obligado sino por gusto, y a pesar de la chicharrera, me siento realmente un privilegiado al poder disfrutar de este maravilloso panorama sin otro ruido que el de mis pasos y mi respiración.



Pero aunque todo se ve tan bonito no debo pararme demasiado a sacar fotos o a descansar porque la predicción dice que esta tarde habrá una tormenta de las gordas por esta zona. Y la verdad es que ya se empiezan a ver algunas nubes que antes no estaban.


Así que le doy caña a las piernas y en poco más de hora y media ya me he despachado casi mil metros de desnivel.


Aún me quedan 900 metros para los que necesitaría unas dos horas aproximadamente, y si miro al sur parece que voy a tener tiempo suficiente,


pero si miro hacia el norte la cosa pinta ya más gris.


Aunque sin ningún motivo para darme la vuelta, aún. Así que continuo mi camino que ahora me lleva por una estrecho pasillito verde hasta una repisa desde donde se continua con una corta escalada en roca de grado III.


El paisaje que se despliega ante mis ojos me hace sentir el montañero más feliz del mundo.


De pronto un fuerte ruido me saca de esa nube en la que estaba y me trae de golpe a la realidad. Miro hacia arriba esperando ver caer un montón de piedras pero no pasa nada.
Me pregunto que habrá sido eso. Al no ver nada raro sigo caminando, pero antes de dar diez pasos vuelvo a escuchar el mismo ruido seco, esta vez aún más fuerte. Vuelvo a mirar hacia arriba...


Son truenos !!!  En unos pocos minutos se ha cerrado el cielo por completo y ha empezado una tormenta electrica. Pienso en como voy a destrepar los pasos de roca que acabo de escalar y a desandar por ese estrecho pasillo con la hierva mojada si se pone a llover, así echo a correr (literalmente) para abajo y consigo pasar por ahí justo cuando grandes gotas de agua empiezan a vestir las rocas de mi alrededor con un traje de lunares.
Los truenos son cada vez más fuertes y más seguidos y me muero de miedo al verme corriendo por mitad de estás pendientes tan inclinadas en mitad de un aguacero y cayendo rayos por todas partes.
Justo cuando llego a la zona arbolada decido meterme debajo de unas rocas enormes como casas que alguna vez cayeron desde allí arriba y que ahora me ofrecen un refugio donde tomar un poco de aire y esperar a que escampe, lo que me deja acuclillado más de una hora, tras la que al parar de llover decido ponerme de nuevo en marcha, pero las piernas se han quedado agarrotadas por el tute que les he dado corriendo para abajo casi mil metros de desnivel negativo y por haberse enfriado en esa postura, así que los primeros metros los ando como un pato. jajajaja, que vergüenza si me ve alguien así.
Al llegar de nuevo al pueblo el cielo se ha vuelto a abrir.


Y con las nubes, se disipa también mi miedo a que "me parta un rayo".



Bueno, pues una nueva experiencia y una montaña más a mi lista de pendientes. :)

No hay comentarios:

Publicar un comentario